De vez en cuando, la gente me dice: -No te pongas así, es sólo música. Eso
es mucho tiempo desperdiciado por “tan
sólo música”. Ellos no
entienden los sacrificios, el tiempo empleado, o las horas invertidas en “sólo música”. Para ellos es tiempo perdido, sin utilidad; tiempo
malgastado en un hobby que, según dicen, no es lo más importante. Nada más
lejos de la realidad. Cada minuto empleado en música, equivale a 60 segundos de
trabajo, esfuerzo, sacrificio, aprendizaje, constancia, pasión y felicidad. Y
ninguno de esos minutos se pierde cuando toco o estudio. Porque estudiar una
carrera de 14 años es complicado, para que luego siempre me pregunten: -¿Y qué más vas a estudiar? La música es
demasiado dura y difícil como para que se de en la Universidad. O quizás es que
los músicos somos demasiado especiales como para juntarnos con cualquiera...
Algunos
de los mejores momentos de mi vida se han realizado con “sólo música”...
Han pasado muchas horas en las que mi única compañía y mi única amiga ha sido
la música. Ella, que en esos días de oscuridad, con el simple sonido de una
nota me ha dado comodidad, tranquilidad y un motivo para seguir. Porque la
música nos une, y en muchos momentos ha sido mi única razón para superar el día
a día. Es “sólo música”, pero con Ella jamás me sentiré
sola.
Debido a
“sólo música” me levanto muy temprano, aunque
me haya acostado más tarde que mis amigos, sacrifico mi tiempo “sólo” por tocar
y estudiar... Debido a la música he crecido como persona a la vez que crecía
como músico. “Sólo” por la música, soy como soy. Para
mí y para la gente como yo, la música no es “sólo música”. Es el conjunto de
todos nuestros sueños, de los recuerdos del pasado, de la alegría del momento y
del duro trabajo encarando el futuro. Ella es mi vida, lo es Todo. Pero aun
así, la gente no dejará de preguntarme: -¿Y
con esto te vas a ganar la vida? Y la respuesta es tan simple como: -Sí, y cuando trabaje lo haré en lo que
realmente me gusta.
Y hay
otra gente que me pregunta: -¿Y por qué
estudiar música? No es una respuesta fácil. Tengo muchas razones por las
que estudiar música: Porque puedo diferenciar al oboe de la tuba, de la
trompeta, del contrabajo… sin tener que llamarlos a todos “la flauta esa que tocas”. Porque el italiano es mi segundo
idioma. Porque me encanta hacer chistes con la afinación de trombones, violas,
y demás instrumentos que tienden a la desafinación. Porque analizar un
movimiento de un cuarteto en tan sólo 3 horas es un gran reto. Porque por mucho
que te aprendas una obra, en la audición no darás ni una y acabarás mirando
raro a tu instrumento cuando te equivoques. Porque tengo la excusa perfecta: -Tengo ensayo. Porque se cuál es el día
de Santa Cecilia. Porque ir a campamentos de música y conocer a gente con la
misma pasión que yo, es lo mejor del mundo. Porque donde tú ves un “chim-pum”, yo veo una cadencia perfecta; y en un 6 y un 4 la
cara de tu retrato, yo veo la segunda inversión de un acorde. Porque irse de
cena después de un concierto es genial. Porque hacer medicina está muy visto.
Porque Mozart, Beethoven, Schubert, Bach… ya son de la familia, y porque me
encanta expresar sin tener que hablar, y hacer disfrutar a los demás con mi
música.
Así pues,
querido músico, la próxima vez que escuches decir la frase: -es “sólo música”
sonríe, porque ellos “simplemente” no lo entienden. Quédate con el
convencimiento de que SÍ, que la música es lo más importante del mundo, de TU
mundo y del mundo de los que, como tú, aman la música por encima de TODO.
Porque la vida sin música sería un error…♥
Patricia
¡Aplausos infinitos!
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